El panel 300C conforma un cielo monolítico aplicado en dos estaciones de la línea 2 del Metro, siendo una la estación terminal La Cisterna que se constituirá como un centro neurálgico de encuentro con otras estaciones terminales de otros medios de transporte.

Esta es la primera obra que se hace con este innovador producto, cabe hacer notar que al momento de la especificación se pensó en importarlo desde Europa, sin embargo el éxito previsto para el producto permitió desarrollar su fabricación en Chile.

La pureza y modernidad de estas estaciones se ha logrado con el color blanco y la planitud y estética del panel 300C, que además presenta una característica funcional previniendo eventuales filtraciones en la zona de andenes.