Te presentamos este nuevo proyecto, realizado por la oficina de Carlos Mardones Arquitectos + Magia Liquid
En el cual destacamos la aplicación de revestimiento Screenpanel XL en acero corten perforado y Mallas GKD Perfil M en su fachada , además de la utilización de pisos de la línea Deck Bamboo de Moso en sus terrazas.
Lobo Brasserie nace cuando sus dueños franceses miran hacia Chile con la idea de abrir un restaurant que fusione latécnica de la gastronomía francesa con ingredientes locales chilenos. Se trabajó de manera colaborativa, partiendo desde las definiciones estratégicas de la marca, abordado integralmente el proyecto, pasando por su nombre, diseño gráfico, arquitectura, interiorismo, diseño digital y comunicacional. En síntesis, el proyecto abarca desde la idea hasta laexperiencia.
Para el emplazamiento del proyecto de Arquitectura los dueños habían escogido un terreno en calle El Rodeo, una calle comercial emergente que se está transformando en sede de variados restaurantes. Las amuralladas y cerradas casonas de estilo chileno, aún existentes en este barrio, de amplios jardines, inspiraron el proyecto de arquitectura. De este modo, las decisiones urbanísticas y arquitectónicas consistieron en abrir completamente el lote, despojándolo de sus cierros y diseñando un volumen hermético hacia la calle; un volumen de acero que soporta una gran masa de hormigón en volado; este volumen hermético hacia la calle contrasta con un interior totalmente abierto hacia los jardines. Entre los dos cuerpos de acero y hormigón se encuentra una serie de vigas de acero negro y madera, el cual vuela sobre el costado conformando un paseo peatonal hacia el acceso principal. La caminata es gradual develando
lentamente lo que se vive al interior. El elemento sorpresa fue clave, antes de ingresar se propuso un gran ventanal a plomo con la fachada de acero para exponer en pleno el trabajo al interior de la cocina.
La cocina debía ser el corazón del restaurante, como lo es en una brasserie francesa, por ello la cocina se enfrenta a un vacío creado por una doble altura, lo que permite que ella sea la protagonista y pueda verse desde todos los sectores del restaurant. Al mismo tiempo la transparencia de la doble altura, con altos ventanales y lucarnas en el techo abre el volumen a los jardines del restaurant.
Afuera, entre los jardines exteriores, es posible disfrutar de las terrazas al aire libre. Mientras que Los ventanales de vidrio templado se pliegan sobre si mismos para conectar completamente interior y exterior en verano.
Tanto los materiales a la vista, hormigones expuestos, aceros, maderas tradicionales chilenas; como la configuración del espacio, volumen volcado completamente hacia el interior y en su centro, un vacío que permite ver constantemente la cocina, celebra la reunión entre la experiencia del cocinar con la de comer. Así dimos vida a Lobo